Si bebes, no folles.

El sábado por la tarde cogí una pequeña borrachera en casa. Acabamos follando en distintas partes de la casa, salvajemente y sin importarnos un bledo si nuestros gemidos o ñiqui-ñiquis los oían los vecinos.

Me desperté en la cama, en pelota picada y con juguetes y pañuelos usados encima de la mesilla. Tenía lagunas de la noche anterior, aunque afortunadamente no tenía resaca. Recordaba algunos de los orgasmos a la perfección y también otros folleteos muy mecánicos.

Pero no lo recordaba a él en mis lagunas de esa noche, recordaba las posturas, los gemidos, una piel, unos labios, una polla, unos hombros fuertes... Y sé que era él porque no hay otra opción, pero realmente en ese momento, me importaba un pimiento si era él o era otro tío.... Sólo importaba lo bien que nos lo estábamos pasando.

No sé si es grave, doctor y soy una tía salida (y borracha :) con la líbido por las nubes y los sentimientos por los suelos o es que en esos momentos "el amor" importa más bien poco y le pasa a todo el mundo...